Arquitectura moderna, exuberantes espacios verdes, calidad de vida, seguridad y tecnología al servicio de la humanidad junto con excelentes oportunidades económicas, así será la nueva ciudad que se prometió para Arabia Saudita y la gran novedad es que el motor de la ciudad serán las energías renovables. 

¿Una nueva ciudad?, ¿dónde estará?, ¿cómo será?, ¿uno de los mayores exportadores de petróleo impulsando energías renovables?, ¿qué tan factible es?, son algunas de las preguntas que se nos vienen a la mente ante la promesa de esta especie de “paraíso”. Es por esto que en El Definido decidimos indagar e intentar responder esas preguntas.

El gran anuncio

Fue hace algunas semanas que el príncipe heredero de Arabia Saudita, Mohamed bin Salman (32), anunció la construcción de un megaproyecto: una ciudad bautizada como NEOM (abreviatura de “Nuevo Futuro”) y que estará ubicada en el desierto, en las fronteras de Arabia Saudita, Jordania y Egipto.Un punto totalmente estratégico que conectará a Asia, África y Europa. NEOM tendrá unos 468 kilómetros de costa al Mar Rojo y al oeste, una ruta comercial clave.

La idea es crear una ciudad parecida a Dubái, pero mucho más avanzada y tecnológica. Esta gigantesca ciudad, tendrá más de 26.000 km². ¿En comparación? Sería 33 veces el tamaño de Nueva York y en escala nacional toda nuestra R. Metropolitana tiene tan solo unos 15.000 km².

¿Y cuánto costará la gracia? Estiman que $ 500 mil millones de dólares (es decir, más de 315 billones de pesos chilenos). El país espera financiar $ 300 mil millones del proyecto con la venta del 5% de Saudi Aramco (empresa estatal de petróleo y gas natural) y el resto provendría de inversores privados.

¿Un gigante petrolero amigo de las energías renovables?

NEOM será una de las ciudades más grandes que funcione sin combustibles fósiles. Las energías renovables, solar y eólica, constituirán el motor de ciudad, una de las características más llamativas en medio de un gigante petrolero como Arabia Saudita. No es un paso menor, si consideramos que Arabia Saudita tiene el pozo petrolero más grande del mundo y su petrolera estatal (Saudi Aramco) es la que tiene la mayor capacidad de producción de hidrocarburos.

Pero la conciencia medioambiental por fin gana terreno, los acuerdos mundiales ya no son tan simbólicos y los combustibles fósiles tienen fecha de término… Así que se están subiendo al carro.

La ciudad se alimentará completamente con energía renovable. Solar y eólica, principalmente.

El principal objetivo de NEOM es disminuir la dependencia de Arabia Saudita del petróleo, recurso que ha bajado su precio y del que depende el 75% de las exportaciones del país. Se cree que con la construcción de este proyecto, se podría expandir la economía, aseguró bin Salman.

La ciudad se enfocará en una variedad de industrias como: energía y agua, biotecnología, alimentos, fabricación avanzada, movilidad, entretenimiento, entre otros. "El enfoque en estos sectores estimulará el crecimiento económico y la diversificación fomentando la innovación y la fabricación internacional, para impulsar la industria local, la creación de empleo y el crecimiento del PIB en el reino", dijo bin Salman.

Será el mismo bin Salam, la autoridad a cargo de supervisar el proyecto.

Otras maravillas que promete la ciudad

Hay otras cosas que podrían convertir a NEOM en un lugar perfecto para vivir en los tiempos de hoy:

● Sus residentes tendrán cobertura completa de internet gratuita, apoyando así la educación y comunicación.

● Tendrá accesos que les permitirá a los residentes llegar a sus destinos caminando para fomentar un estilo de vida más saludable. “Esto será habilitado por principios de diseño urbano de vanguardia para diseñar una infraestructura a prueba de futuro”.

● Los servicios públicos estarán completamente automatizados para ayudar a proporcionar servicios eficientes para sus residentes y negocios.

● Los trabajos mecánicos y pesados los harán los robots.

● Se cultivará en invernaderos con energía solar.

● Tendrán opciones de transporte verdes y automáticas.

● Sus habitantes tendrán educación en línea, y vivirán en hogares sin emisiones de carbono.

Dicen que se convertirá en el lugar más eficiente y avanzado del mundo. Parece una promesa futurística con ribetes de ciencia ficción, ¿no? Bueno, al menos, según indican las autoridades, esta ciudad estaría lista para ser ocupada el 2030.

Casi casi independiente

Otra novedad es que esta ciudad operará como una zona económica independiente. Tendrá sus propias leyes, impuestos y regulaciones especiales creadas para impulsar el crecimiento saludable y la riqueza para la región, los inversores y residentes. Estas serán elaboradas por los inversores de acuerdo con las mejores prácticas internacionales. Las mujeres, por ejemplo, tendrán los mismos derechos que los hombres, una revolución en un país con un gobierno religioso tan radical.

Arabia Saudita era hasta hace poco el único país el único del mundo donde las mujeres no podían manejar y hace menos de un mes permitieron que pudieran ir al estadio.

“La zona será independiente del marco gubernamental existente del Reino, excluyendo las leyes soberanas”, indican. ¿Qué significa esto? Que todo lo relacionado con el sector militar, la política exterior y decisiones soberanas, permanecerán bajo la discreción del gobierno de Arabia Saudita.

NEOM

Las expectativas para este gran proyecto son altas: “Se espera que emerja como un centro global líder que anuncia el futuro de la civilización humana al ofrecer a sus habitantes un estilo de vida idílico, NEOM busca atraer a talentos de alta calidad de todo el mundo para superar los límites de innovación como nunca antes, e impulsar el crecimiento de esta zona y sus residentes”, aseguran en el sitio oficial del proyecto. ¿A lo Silicon Valley?

¿Y quiénes vivirán en NEOM?

“Al ofrecer a sus habitantes un estilo de vida idílico junto con una excelente economía

oportunidades que supera a cualquier otra metrópolis, atraerá a sauditas y expatriados, como lo hacen todas las otras sociedades globales”, aseguran desde el proyecto.

Ya, sí, con ese tipo de descripción parece casi la ciudad prometida, habrá que ver si cumplen las altísimas expectativas que están generando entre sus habitantes.

Los trabajos para llevar a cabo este megaproyecto ya empezaron y se están comunicando con una amplia red de posibles inversores y socios. Se estima que para 2025, la ciudad estará en la primera fase de desarrollo y que en 2030 NEOM se encuentre 100% operativa.

¿Qué motivaciones podrían haber detrás de este anuncio?

Hoy Arabia Saudita, oficialmente llamado Reino de Arabia Saudita, es un país que está bajo una monarquía absoluta. El rey es Salmán bin Abdulaziz (81) y su hijo Mohammed bin Salman (32) es el príncipe heredero y quien en el último tiempo ha ido ascendiendo. Sus críticos dicen que podría estar a punto de dar un golpe de Estado, que destronaría a su padre, sin embargo, hay quienes aseguran que podría estar en medio de una estrategia más cuidadosa.

Y es que el príncipe heredero ha liderado el último tiempo una atrevida campaña que combina la modernización social del país con una apuesta exterior que podría romper equilibrios en la región. Por ejemplo, una de las medidas que tomó fue el arresto de más de 200 personas (incluyendo 11 príncipes, varios ministros y hombres de negocios), en el marco de una campaña contra la corrupción. Por otro lado, ha llevado una agresiva política exterior prooccidental y antiiraní.

El heredero ha dicho públicamente que quiere que Arabia Saudita vuelva a ser como antes y está intentando llevar a cabo una transformación económica y social que asegure la supervivencia del reino en un futuro sin petróleo.

"Arabia Saudita no fue así antes de 1979. Queremos volver a lo que éramos, el Islam moderado que está abierto a todas las religiones. Queremos vivir una vida normal... convivir y contribuir al mundo", aseguró el príncipe el mismo día que anunció la construcción de NEOM, sin embargo, hay quienes dudan de sus intenciones.

Según la profesora de historia de la Universidad de Yale, Rosie Bsheer, esta declaraciónfue solo una estrategia para aumentar la confianza de los inversores. “Esa promesa contenía tanto una promesa como una amenaza”, dice Bsheer. Cree que los ataques a la religión extrema suenan positivos para Occidente, pero que la segunda parte de la declaración de bin Salman es la que trae problemas: el señalar la revolución iraní de 1979 como el punto de inflexión en la política saudita.

“Indica sus planes de intensificar el conflicto con Irán y sus representantes, como una forma de apuntalar el respaldo mundial después de no haber conseguido el apoyo en casa”, asegura.

¿Qué te parece esta iniciativa? ¿Crees que puede significar un giro en el mundo petrolero?