Un hecho histórico es lo que acabamos de vivir en las elecciones del domingo pasado.

En 1935 Herminia Aburto se convertía en la primera candidata mapuche aspirante a un cargo público, en las primeras elecciones donde se ejerció el sufragio femenino en Chile; marcando así un precedente en las comunidades indígenas, en las mujeres y en el país completo.

Hoy, más de 80 años después, ese sueño se hace realidad. Por primera vez en la historia, Chile consigue una diputada indígena, gracias al voto popular. Estamos hablando de Emilia Iris Nuyado Ancapichún, mapuche-huilliche soltera de 49 años, oriunda de Río Negro (Osorno), que tras sumarse a la lista de candidatos a diputados del Partido Socialista (PS) por el distrito 25 de la región de Los Lagos (Osorno, Llanquihue, Frutillar, Puyehue); logró quedarse con un escaño en el Congreso.

Si bien obtuvo 7.855 votos, correspondientes al 6,27% del total (inferior a varios de los candidatos que perdieron); Emilia ganó gracias al nuevo sistema electoral proporcional: ingresó al cupo de mujeres de la lista del PS y fue arrastrada por su compañero de pacto, Fidel Espinoza, candidato que obtuvo la primera mayoría de la zona (21, 47%).

Pero no es una novata en la política. Para nada. Emilia lleva 25 años como dirigente indígena, realizando un intenso trabajo al interior de las comunidades mapuche huilliches, quienes respaldan su elección como la primera diputada indígena del país.

Es poco lo que se sabe públicamente de Emilia, su vida, el detalle de su trayectoria y sus propuestas como diputada; pero sabemos que defiende la causa mapuche y la necesidad de reconocimiento constitucional de los pueblos indígenas. También que ha cuestionado el actuar de Carabineros en la zona, que ha planteado con fuerza el tema de la participación de la mujer indígena, y que busca mayores fondos para la educación indígena.

Tras su triunfo, la diputada agradeció a sus votantes señalando que representará a quienes "sueñan con lograr un Chile en que los mapuches y los no mapuches nos miremos en igualdad de condiciones".

Respecto a lo poco que se sabe de ella, Emilia comenta lo siguiente: "Creo en que uno tiene que trabajar cerca de la gente, ellos son quienes a uno le tienen que validar y valorar, y por lo tanto aquí yo no necesité de los medios para que me dieran a conocer. Tampoco tenía los recursos para que ellos informen quién era Emilia Nuyado. Aquí solo hay 25 años de trabajo con las comunidades, 25 años de lucha por ganar espacios y ser su voz. Soy una mujer relativamente tímida, pero cuando se trata de afectar a nuestra gente, saco las garras y alzo la voz más fuerte que los otros".

Su trayectoria política y social

Durante cuatro periodos (2000-2016) Emilia fue concejala por el PS en la comuna de San Pablo (X Región), y también consejera ante la Corporación Nacional de Desarrollo Indígena (Conadi) en tres periodos. En ambos cargos fue electa popularmente con las primeras mayorías.

Milita en el PS desde el año 2000, y luego de que los militantes del partido le propusieran ir como concejal, representando a la comunidad indígena; cuenta que fue muy difícil entrar a la lista de candidatos a diputados, ya que había muchos aspirantes.

Pero las comunidades salieron a defender su espacio, tanto indígenas como personas no mapuche. "Ellos querían marcar la historia con una mujer mapuche huilliche que pueda llegar desde el territorio huilliche al Parlamento", señala Emilia sobre sus votantes.

Justamente se aferró a esa idea para ganar votos, haciendo de su slogan "Del territorio huilliche al Parlamento". Y lo logró.

Su tendencia socialista viene de su familia. En una entrevista radial a Radio Sago, cuenta que su padre y madre toda la vida defendieron los principios del socialismo, reconociendo como líder al ex presidente Salvador Allende; a quien Emilia también considera un personaje inspirador para ella en la lucha de las clases sociales y sus transformaciones.

Manos a la obra

Emilia señala que su primera lucha como diputada será lograr que tanto en el Parlamento como en el Congreso, existan mecanismos de participación, consulta y procedimientos claros donde los pueblos indígenas tengan la posibilidad de participar, señalar y ser consultados por los diversos proyectos que se estén votando en el país.

Los pueblos indígenas "tienen que estar para defender una nueva visión de una sociedad, en que sigamos siendo un país unitario e indivisible, yo estoy de acuerdo con eso, pero en esa nación indivisible tiene que haber, sí o sí, participación política", señaló Emilia.

También agrega que trabajará en hacer cumplir la aplicación del Convenio 169 (sobre Pueblos Indígenas y Tribales en países independientes) de la Organización Internacional del Trabajo (OIT); para definir políticas que sean adecuadas a los territorios, en materias de vivienda, caminos, infraestructura y mayor presupuesto garantizado a la Conadi para los pueblos indígenas, las que, según ella, hoy no se estarían implementando.

Respecto a su futura votación en los proyectos del Parlamento, Emilia señala que será consecuente y que todos sus votos serán previamente consultados a las organizaciones y personas que la apoyaron, quienes la llevaron a esta instancia y creyeron en ella como su representante. Esto respondería, por ejemplo, a las siguientes luchas mencionadas por ella:

- Tener mejores caminos

- Que la beca indígena sea un derecho

- Que los pueblos indígenas tengan real representatividad en el Congreso

- Sacar a las mineras que se quieren instalar en el territorio mapuche

- Lograr que las aguas le pertenezcan de nuevo a los pueblos indígenas

- No apoyar a pesqueras, forestales o cualquier grupo económico "que pague por emitir el voto", según expresó en esta entrevista.

- Reconocimiento constitucional de los pueblos indígenas: reconocer que Chile es una nación conformada, desde sus inicios, por varias culturas y pueblos que aportaron con sus recursos naturales a la configuración del país. Y reconocer, explícitamente, sus derechos sociales, económicos y culturales.

Emilia agregó en su primera entrevista tras la elección, que ésta es "una conquista muy esperada, que dedico a aquellos luchadores que han muerto en la movilización social, a quienes han sentido el dolor y la discriminación, y a los que soñaron también con llegar algún día al Parlamento. Pero con humildad y respeto quiero decirles a los legisladores que cuando hablamos de inclusión esta tiene que ser más profunda y reconocer a las Primeras Naciones. Las políticas en materias indígenas se definen precisamente en el Parlamento. No en la Conadi o el Ministerio de Desarrollo Social".

¿Qué te parece el triunfo de Emilia? ¿Estás de acuerdo con sus planteamientos?