¿Te acuerdas de los pucarás? Si pusiste atención en las clases de Historia en el colegio, probablemente lo harás (¿te fijaste que rimó?). Correspondían a una especie de fortificación inca que servía como un sistema de defensa en momentos de guerra. Y como esta civilización se expandió desde lo que ahora es Colombia hasta una parte de Chile, aún existen varios ejemplares de estos en la región.

De hecho, hay uno en Santiago: precisamente en el cerro Chena, en San Bernardo. Es más, éste también posee en sus faldas de la ladera sur un cementerio inca. Uno de verdad, no como los mitos urbanos que inventan en los colegios para asustar a los de los cursos más chicos. Así que, en el fondo, tenemos un importante centro ceremonial inca en nuestra capital y no muchos lo sabíamos.

Aunque en el corto plazo los ojos de Santiago se centrarán en este lugar. Ya que existe un plan para cambiarle por completo la cara al cerro Chena. Incluso, el Plan Maestro de remodelación ya fue hecho y ahora lo que falta es que se lleve a cabo una licitación para que alguien se adjudique el proyecto. Pero, ¿de qué se trata todo esto?

Los 22 candidatos

En la Región Metropolitana existen 22 cerros-islas: es decir, que están integrados en la ciudad, pero que no son parte de los cordones montañosos de la Cordillera de los Andes o de la Costa. Entre ellos están los cerros Apoquindo, Blanco, San Cristóbal, Chena, Renca, etc. La gracia de ellos, es que son considerados como una gran oportunidad para integrar “sistemas verdes” en la ciudad, si es que se realiza algún tipo de trabajo al respecto.

Es por esto que en el 2014, el Gobierno de la Región Metropolitana preseleccionó a cuatro de los 22 cerros-islas para impulsar proyectos de recuperación urbana ambiental en uno de ellos. Para esto, los municipios correspondientes, Renca y Quilicura por cerro Renca; Recoleta por cerro Blanco; Puente Alto por cerro Las Cabras junto con Calera de Tango y San Bernardo, por cerro Chena, tuvieron que presentar una propuesta de desarrollo para sus cerritos solitarios.

Para elegir al ganador, se organizó el concurso “Iniciativas para cerros islas en la Región Metropolitana” y, a fines del 2014, se dieron a conocer los resultados y fue el cerro Chena el que se llevó el primer lugar. Eso significó que obtuvo un financiamiento íntegro del diseño de la propuesta y una estrategia de financiamiento en etapas sucesivas. O sea, un extreme makeover para el cerro-isla con pucará y cementerio inca.

Se viene un nuevo Parque Metropolitano

De acuerdo al documento oficial realizado por la división de Planificación y Desarrollo del Gobierno Regional Metropolitano, serán cuatro los focos de trabajo en el cerro:

-Un área parque que consolida el avance que se tiene por Parque Metropolitano. Es decir, será considerado como un nuevo Parque Metropolitano, al igual que el del San Cristóbal.

-Un área patrimonial en la ladera sur que destaca la presencia del Pucará de Chena.

-Un área de preservación ecológica en la ladera poniente que protege la vegetación y fauna que habita en el lugar, ya que impide cualquier intervención.

-Un área verde en la zona de expansión urbana declarada en el plan regulador intercomunal.

La idea de este trabajo es poder construir un gran espacio público en un sector donde las áreas verdes son escasas. También se busca reconquistar las cumbres del cerro Chena por su enorme potencial de mirador Metropolitano, transformarlo en un espacio regional para actividades sociales, culturales y deportivas; y proteger su valor histórico y arqueológico.

Fuente: Gobierno de la Región Metropolitana

¿Qué tendrá?

El proceso de intervención estará dividido en etapas y las fechas de culminación de estas dependerán de la licitación. Eso sí, lo que se espera realizar es la instalación de un teleférico, un funicular, un memorial de Derechos Humanos, reforestación del lugar, senderos exploratorios, zonas de picnic, miradores, ciclovías, una nueva laguna, una explanada cívica, mobiliario y equipamiento urbano. Es decir, no tendrá nada que envidiarle o su hermano del San Cristóbal.

En total, serán 5 hectáreas de propiedad fiscal que serán intervenidas y se calcula que el gasto total del proyecto bordeará los $8.610 millones de pesos chilenos.

¿Qué te parece esta iniciativa? ¿En qué otro cerro harías un parque de este tipo?