¿Cómo lograr que las nuevas generaciones se interesen por la historia mundial? ¿Cómo volver los áridos contenidos de los libros en algo atractivo para los adolescentes? ¿Cómo cultivar en la memoria de los jóvenes los hechos relevantes del pasado?

Hoy en día, los adolescentes están cada vez más alejados y desinteresados de la historia mundial. Las nuevas generaciones prefieren vivir el presente y gozar del uso de las tecnologías, en lugar de recurrir a libros que expliquen el pasado. ¿Por qué?

Porque para ellos es muy difícil familiarizarse con contextos que ocurrieron hace más de 50 o 70 años, porque la realidad actual es muy diferente y no ven de manera concreta las repercusiones en su día a día de estos hechos históricos; y porque incluso sus padres no lo vivieron personalmente para contárselos.

Y como la mejor forma de transmitir la historia es mediante el boca a boca, contando los hechos más sorprendentes para mantener la memoria viva; los historiadores están buscando una nueva forma de llegar a las nuevas generaciones. ¿Cómo? Hablando en su lenguaje y recurriendo a sus plataformas de interacción.

Daniel Rodríguez, historiador español, decidió recurrir a Twitter para llegar al exigente nuevo público. A través de su cuenta Guerra Civil en Tuit, busca recrear los principales hechos ocurridos entre 1936 y 1939 en 280 caracteres, aquellos que dividieron profundamente a España entre nacionalistas y republicanos (fascistas y comunistas, como se les solía llamar) y que dieron paso a la dictadura del conservador Francisco Franco.

De esta forma, el historiador juega el rol de cronista de guerra y logra despertar el interés de los usuarios, al llevar hechos concretos de la guerra al día a día actual, acompañados de fotografías; permitiendo así que podamos comparar nuestra actualidad con lo que pasaba hace 80 años en "un día como hoy…".

La necesidad de contar la historia tal como fue

Así como aquel tuit, el historiador va narrando todo tipo de acontecimientos como el asesinato del diputado José Calvo, los enfrentamientos entre derecha e izquierda, el Golpe de Estado fallido de 1937, el apoyo de artistas e intelectuales extranjeros a los republicanos, las intervenciones de Alemania, Italia y la Unión Soviética, etc.

Rodríguez señala que es sumamente necesario que las nuevas generaciones entiendan y conozcan los hechos reales de los conflictos mundiales y nacionales, que comprendan el contexto y las dos caras de la moneda y no se queden sólo con la opinión de sus padres y familiares, las que muchas veces sólo siembran rivalidades y rencores personales que tiñen la historia y que perjudican el perdón y la conciliación nacional.

Esto porque, como bien menciona Javier Alejandro Corredor, psicólogo que trabaja en el Centro de Memoria colombiano, "una historia oficial idealizada y sin complejidad es tan peligrosa como el olvido. Es un derecho de los jóvenes saber su pasado. La verdad no genera división, sino todo lo contrario".

Y esto es justamente lo que pasa en España respecto a la Guerra Civil, donde hasta el día de hoy existen rivalidades (al igual que en Chile entre Pinochetistas y Allendistas); por lo que Rodríguez comenta que "me gustaría volver a despertar el interés de los más jóvenes sobre esa parte de nuestra historia".

Sociólogos de la Unesco además, señalan que estas nuevas generaciones son clave para lograr la conciliación y dejar de lado las rivalidades políticas y sociales que nacieron en estos conflictos; y esto se debería justamente a la distancia etaria y emocional que tienen frente a los hechos.

Y, por otro lado, además de la conciliación, el recordar la historia también sirve para que las nuevas generaciones estén conscientes de las terribles consecuencias que conlleva la guerra y el extremismo, la cantidad de muertos, exiliados y desaparecidos.

Es decir, para que nunca más se vuelvan a repetir los graves errores y daños políticos que causaron la muerte a más de 500.000 personas y la desaparición de otros 114.000 durante la Guerra Civil Española y los años posteriores de dictadura franquista (y lo que pasa en todas las guerras y en todos los conflictos políticos graves del mundo entero).

Otros episodios de la historia narrados en Twitter

La idea de Rodríguez de narrar la Guerra Civil Española en Twitter la tomó de un colega de la Universidad de Oxford, quien hizo algo similar pero con la Segunda Guerra Mundial.

Se trata de Alwyn Collinson, quien lleva seis años tuiteando los acontecimientos más importantes de la II guerra en su cuenta @RealTimeWWII, con el fin de recordar a la gente la gravedad e importancia de la II Guerra Mundial.

Su cuenta ya tiene más de 500.000 seguidores en su versión de inglés y más de 10.000 en su cuenta en español; y al igual que Rodríguez, este historiador va narrando día a día hechos puntuales que pasaron durante 1945 y 1949, basándose en titulares de la época y documentos fotográficos, como el siguiente que corresponde al contexto navideño en Inglaterra, donde el juguete más popular fue el muñeco del primer ministro de Reino Unido (Neville Chamberlain), que superó en ventas al muñeco de Hitler.

También se hizo algo similar con los 100 años de la Revolución Rusa, gracias a National Geographic y su #Rusia1917NatGeo, donde por tres días (período en el que ocurrió la insurrección bolchevique) se fueron publicando tuits con el "minuto a minuto" de la revolución.

Y ya muchos profesores de historia han entendido que las redes sociales son una buena herramienta para enseñar e interesar a sus alumnos, ya que como dicen en la era digital, las historias se cuentan a través de las redes sociales, por lo que no pueden quedarse atrás.

Y así hay profesores quienes han utilizado Twitter para que sus alumnos aprendan sobre la Reforma y la Contrareforma, el Renacimiento, sobre la Revolución Francesa, la Independencia de Estados Unidos, la Primera Guerra Mundial, la caída de las Torres Gemelas del 11-S, entre otros.

¿Te gustaría que en Chile hicieran algo similar con el período de la UP y dictadura?